Su diseño apaisado ofrece una excelente visión del fuego, y está preparado para la instalación de forzadores eléctricos que permiten derivar aire caliente a otros ambientes, de manera manual o automática. El interior de la caja de fuego está recubierto con ladrillos refractarios y cuenta con dos cámaras de combustión que eliminan gases y olores, logrando un alto rendimiento de biomasa gracias a su sistema de doble combustión. La entrada de aire vertical limpia el vidrio vitrocerámico NeoCeram, mientras que su pintura de alta temperatura, cierre de puerta con cordón de fibrocerámica y bisagras ocultas garantizan un rendimiento óptimo. Este equipo genera calor por convección y radiación, incorporando el eficiente sistema de combustión Ñuke.