Existen varios tipos de extractores como con motor axial que es capaz de mover grandes volúmenes de aire. El motor centrífugo, soporta las pérdidas de carga producidas por filtros, ductos o por reflectores ventilados. El motor mixto que el flujo de aire en este tipo es más óptimo durante el recorrido que realiza por el aspa, gracias a la combinación del diseño axial y radial.

Los extractores deben colocarse cerca de los focos de contaminación, para captar el aire viciado antes de que se difunda por el hogar. Se debe alejar el extractor de las ventanas para evitar que pueda introducirse de nuevo en el interior el aire contaminado. Es recomendable ubicarlo en la parte más elevada del techo ya que es más fácil la evacuación del aire caliente o viciado.

Para elegir un extractor de aire es importante primero calcular el volumen de aire de la habitación en la que querramos ubicarlo. Para esto, debes multiplicar el ancho x el alto x el largo. Ejemplo: Si el baño mide 2 m de ancho x 2 m de largo x 2,2 m de alto el volumen es de 8.8 m3. Entonces necesitarías un extractor que tenga un caudal entre 7 y 10 veces más que el volumen.

Para renovar el aire de un recinto cerrado, ya sea una habitación, estancia, sala, oficina, cocina o baño, podemos hacerlo introduciendo el aire en una cavidad mediante un ventilador. En este caso tendremos el hogar con una cierta sobrepresión. También es posible renovar el aire extrayendo el que esté contaminado así, el espacio tendrá una cierta depresión y se llegará a un equilibrio.

Para que la extracción sea la esperada, deben habilitarse entradas de aire para sustituir el aire extraído. Estos sistemas consisten en un doble circuito de aire: uno, similar al tradicional de extracción del aire interior contaminado y otro, con muy parecido caudal, que impulsa el aire del exterior hacia el interior del área, de manera que éste se encuentra en equilibrio.