Hay tres formas entre las cuales podrás elegir según tus necesidades. El tipo tradicional es una almohada de forma rectangular común, el tipo cervical es recomendable para las personas que duermen boca arriba o de costado y, por último, el triangular ofrece múltiples posiciones y es ideal para ver tv o leer.

Este tipo de almohadas son ideales para ayudar a aliviar la presión, ya que se adapta a tu cuello y cabeza y también recupera su forma inicial al moverse o levantarse. Están especialmente recomendadas para aquellas personas que sufren de problemas cervicales y/o de espalda.

Las almohadas de este material se destacan por tener una firmeza y grosor mayor a las almohadas de pluma o plumón, ofrecen confort, se pueden lavar con facilidad y suelen ser más económicas que el resto.

En el catálogo de Frávega también podemos encontrar almohadas de espuma, vellón que poseen una gran calidad y otorgan una sensación similar a las plumas o incluso almohadas de microesferas que son muy ligeras.