A grandes rasgos existen 3 tipos de cafeteras express: las manuales, las automáticas y las monodosis. En las primeras la interacción con la máquina será mayor y tendremos que estar más atentos al paso a paso. En las automáticas sólo hay que dejar el depósito de agua y café listos. Y en las monodosis utilizaremos una pequeña cápsula sellada para preparar un café individual.

Las cafeteras express utilizan, en general, 3 sistemas de preparación. Hay unas que utilizan café molido, otras en las que se usa directamente en grano y las terceras en cápsula. La ventaja de los dos primeros sistemas es que con una sola preparación se pueden servir varias tazas, mientras que en el último se utiliza una cápsula por persona.

Si bien hay marcas más tradicionales asociadas al café y las cafeteras como pueden ser Nespresso u Oster, en la actualidad existen varias marcas que producen gran variedad y calidad de estos artefactos. Moulinex, Peabody o Winco, por ejemplo, también ofrecen grandes modelos de cafeteras.

Si bien la preparación del café es un mecanismo repetitivo sin variaciones, no significa que el sabor de la bebida que produce sea siempre igual. Aquí interviene el tipo de café que podemos utilizar o el tipo de cápsulas. Gracias a ello podemos elegir y probar todo tipo de estilos diferentes con una misma máquina.