Samsung

A la hora de elegir un Smart TV Samsung lo ideal es tener en cuenta: el tamaño de pantalla, que se mide en pulgadas; la resolución del equipo; el sistema operativo que utiliza y el tipo de tecnología que tiene. En base al lugar en el que se va a ubicar en la casa u oficina y el tipo de uso que vayamos a darle, podemos seleccionar el que más se ajuste a nuestras necesidades.

El tamaño de pantalla de un Smart TV se mide en pulgadas y puede variar, usualmente, entre las 24 y las 75. Cuantas más pulgadas tenga mayor será el espacio que ocupe en la casa u oficina. Si contamos con un espacio pequeño, lo mejor será optar por 32 pulgadas. Si tenemos un living de dimensiones considerables tal vez sea una buena idea pensar desde las 43 pulgadas en adelante.

A grandes rasgos existen cuatro tipos de resoluciones para las pantallas de un Smart TV: HD; Full HD; 4K UHD y 8K. La resolución se refiere básicamente a la cantidad de píxeles horizontales y verticales que tiene una pantalla. Cuantos más píxeles tenga un televisor, mayor será su definición. Es decir, las imágenes se verán más nítidas y mejor.

Cuando hablamos de tipo de tecnología en un Smart TV nos referimos a la tecnología que posee el dispositivo en su pantalla. Esta puede ser LED, OLED o QLED. Son distintos tipos de ingenierías que utilizan las pantallas para ofrecer la imagen final. La más común de ellas es LED. Las otras dos son versiones más avanzadas y producen imágenes más brillantes y colores más profundos.

El sistema operativo (SO) es el software mediante el cual interactuamos con el equipo. Existen varios SO diferentes y todos tienen características buenas y malas. Algunos ofrecen mejor interconexión con nuestros dispositivos como pueden ser Android TV o Google TV. Y otros tienen mejor interacción con el usuario como Web OS o Tizen.